La historia está escrita con sangre, la misma que derraman los libros esperando ser descubiertos y agonizan ante la era de la estupidez. En esos libros que ignoramos y no por no saber que existen o por no saber donde los encontramos, que aún peor que ignorantes nos hacen brutos. Nos cuentan que hace más de quinientos años nos callan, nos roban, nos mutilan y aunque la lista es larga no hace falta leerla hasta el final para dilucidar que nos violan generación tras generación.
especialmente religiosa. Es este el caso de la religiosidad judeo-cristiana. Todo ese accidentado proceso implicó a largo plazo una colonización de las perspectivas cognitivas, de los modos de producir u otorgar sentido a los resultados de la experiencia material o intersubjetiva, del imaginario, del universo de relaciones
intersubjetivas del mundo, de la cultura en suma... (La colonialidad del poder. Anibal Quijano)
Las evidencias se multiplican a lo largo del continente.
Perú.
Amantaní:
En la isla de Amantanì situada en el lago Titi-Caca los predecesores de la comunidad que allí vivía adoraron al sol mucho antes de que el día de la raza, paradojicamente, sea feriado festivo. Allí los descendientes del Inca se jactan de ser adventistas esperando la segunda llegada de Jesús a la tierra, aunque hay cholitas que difieren de los primeros y dicen ser mormones, sin contar a los judíos con cara de indígena y la iglesia sin cura. Para casarse deben estampar la firma en un libro carente de amor y sin la bendición de un dios prestado. Vestida de blanco la novia disfruta de un gran banquete junto a familiares y amigos brindando ofrendas a la madre tierra por los alimentos que quitamos de sus entrañas. En quechua o en español nunca me atreví a preguntar, entre tanto revuelto, si la novia era virgen.
Huacachina:
La laguna de Huecachina es un oasis que se encuentra ubicado a unos 5 km de la ciudad de Ica. Aquel lugar totalmente
transformado por el capitalismo ha sido consumado en nombre del consumo. Sus
aguas conectadas a una bomba como respirador artificial hoy yacen algo
putrefactas. Ante ella, como por culpa de su existencia, se alzan en todo su perímetro
hoteles y restaurantes. Por si acaso algo de vida le quedase aquel sitio, pueda ver bien clarito, que del desarrollo nadie escapa o al menos nos obliga a aceptarlo como fatalidad del destino.
Aquello estaba dispuesto para el constante gasto y el que así no lo
hiciere, sobraba. Con tanto dinero extraído de la explotación de recursos
naturales paradójicamente nada estaba pensado en función de ello. Decenas y
decenas de
bolsas plásticas danzando al compás de los motores, paseando de aqui para alla, ensordecen al viento que apenas respira por el hedor de los desechos cloacales que sin tratamiento crecen y se reproducen a la sombra de las pocas palmeras que allí sobre viven.
bolsas plásticas danzando al compás de los motores, paseando de aqui para alla, ensordecen al viento que apenas respira por el hedor de los desechos cloacales que sin tratamiento crecen y se reproducen a la sombra de las pocas palmeras que allí sobre viven.
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